El tercer jueves de Noviembre de cada año, es el día en el cual la Maceración Carbónica vuelve a ser popular en el mundo enológico, reencarnándose en los famosos vinos de Beaujolais Nouveau y como una Fénix Árabe hace perder rápidamente sus rastros. 

Técnicamente la Maceración Carbónica es un proceso de “fermentación intracelular” que se desarrolla en granos de uva enteros y en presencia de CO2 (dióxido de carbono); en la práctica, las uvas sin estrujar (proceso mecánico que se utiliza para abrir la piel y favorecer la salida del zumo) se ponen en un tanque de acero en presencia de CO2 antes de proceder a la fermentación alcohólica que transforma, finalmente, el zumo (mosto) en vino.

Este proceso enfatiza el potencial aromático de las uvas (fructuosidad) en detrimento del contenido de polifenoles (taninos en particular) y como resultado tendremos un vino con mucha fruta e intensidad aromática, suave, fresco y agradable al paladar, con baja carga polifenólica (cuerpo, astringencia) y con una vida útil (potencial de guarda) muy limitada.

Después del lanzamiento estacional, que se repite todos los años en esta región del sur de Borgoña (aunque poco tenga que ver con los extraordinarios Pinot Noir de la parte norte) los vinos de Beaujolais producidos con maceración carbónica (Beaujolais Nouveau = Nuevos) comienzan un ciclo vital muy similar al de las mariposas que, durante unos pocos meses, se dedican a regalar al mundo sus colores y su hermosura.

La uva protagonista de los vinos de Beaujolais es la uva Gamay que, además de adaptarse perfectamente a este método de producción, es capaz de brindar caldos producidos con la manera tradicional en algunos viñedos privilegiados (Crus) y que pueden ser aprovechados durante algunos años.

De una forma muy empírica pudiéramos ver en el concepto Beaujolais Nouveau algo similar a lo que hoy conocemos como el fenómeno de los “Red Blends”.

Aunque la historia, la tradición y el origen de estos productos es muy diferente, el objetivo final es muy similar: brindar al mercado un vino rico en fruta y aromaticidad, fácil de tomar y que sea capaz de acercar más público al mundo del vino.